La Ciudad de México y el Estado de México enfrentaron un evento de precipitación pluvial que no se veía desde hace 34 años, superando el promedio histórico de septiembre en un 82%. La emergencia impactó gravemente a más de 11,500 familias en alcaldías como Iztapalapa y el municipio de Nezahualcóyotl, con agua que alcanzó hasta 1.50 metros en viviendas. La respuesta intergubernamental fue inmediata, logrando evacuar el 90% del agua en CDMX en menos de 24 horas y asegurando el