Toxina Botulínica tipo BOTOX para Parálisis Cerebral, Esclerosis Múltiple e Incontinencia Urinaria
Por. Liliana Noble Alemán
@pulsosaludable
CDMX. (17 nov 2011)
Desde hace varios años, la Toxina Botulínica se ha convertido en un deseo que muchas mujeres verán hecho una realidad en alguna etapa de su vida; sin embargo a diferencia de lo que muchos creen, este tipo de medicamentos comenzó a utilizarse como tratamiento para enfermedades que nada tienen que ver con la medicina estética. Sin embargo, cuando alguien escucha la palabra toxina, de inmediato sugiere cierto rechazo y preguntas como ¿pero una toxina, no es peligroso? ¿Seguro que no tiene efectos secundarios? Saldrán a relucir antes de aceptar dicho tratamiento.
Pero gracias a los esfuerzos de Laboratorios Farmacéuticos Allergan es que Botox la única Toxina Botulínica tipo A certificada por la Secretaria de Salud desde 1993 y la FDA en 1989, quien además forma parte del cuadro de medicamentos del IMSS y el ISSTE, es utilizada como terapia para la Parálisis Cerebral, Esclerosis Múltiple, Incontinencia Urinaria, Hiper hidrosis y el hallazgo más reciente; Dolores de Cabeza.
Un poco de historia
El Dr. Humberto Juárez Jiménez Jefe del Servicio de Neurología del Hospital de Especialidades del Centro Médico de la Raza y neurólogo de Neurociencias Clínicas e investigación SC del Hospital Médica Sur, mencionó para Novedades Médicas que Botox es el nombre comercial con el que se conoce a la Toxina y la historia de su aparición es muy interesante, ya que durante la década de 1920 la Toxina Botulínica Tipo A es aislada en forma cristalina por el Dr. H Sommer de la Universidad de California, más tarde para 1946 ésta misma toxina es aislada en forma cristalina por Edward J. Schantz, Ph.D., de la Universidad de Wisconsin-Madison. Para la década de 1950 el Dr. Vernon Brooks prueba que la toxina botulínica bloquea la liberación de acetilcolina en los extremos de las neuronas motoras, induciendo a una “relajación del músculo" sin embargo, las investigaciones siguieron y durante 1960 y 1970 el proceso de purificación de la toxina botulínica de tipo A es mejorado.
El Dr. Alan Scout de la Smith-Kettlewell Eye Research Foundation de San Francisco, prueba la eficacia de la toxina para tratar el estrabismo. El Dr. Scout crea la compañía Oculinum Inc. para realizar pruebas en humanos, posterior a esto es cuando Alllergan Inc. Adquiere los derechos para comercializar Botox.
Además EL Dr. Juárez Jiménez destacó, “es importante mencionar que en la actualidad existen varias toxinas en el mercado, pero cabe resaltar que Botox es la única aprobada por las instancias responsables para diversas áreas terapéuticas, lo cual debe ser un punto a consideración antes de utilizar otras marcas”.
Dolores intensos de cabeza del tipo migrañoso
Por su parte la Dra. María Gloria Pujol Luna, especialista en Psiquiatría, indicó que la somatización es una enfermedad crónica y grave de causas desconocidas, caracterizada por la presencia de muchos síntomas físicos, en particular de una combinación de dolor y de síntomas de las esferas gastrointestinal, sexual y neurológica.
El Dr. Paul W. Peterson con especialidad en neurología y miembro de la División Neurológica del Hospital Ángeles Metropolitano destacó que actualmente se ha incluido dentro de las más de 20 diversas aplicaciones de la toxina una más en donde los pacientes mexicanos han respondido satisfactoriamente.
Los dolores de cabeza, los cuales suelen ser una común causa de incapacidad tanto laboral como social, los orígenes son variables pero los dolores de cabeza más intensos que recomendablemente deberán ser tratados con Botox son los que deban su origen a somatizaciones, dolores de cabeza y columna a causa de un accidente y por migrañas cuyo dolor no sede a los tratamientos convencionales.
El tratamiento suele actuar directamente sobre la acetilcolina -sustancia que sirve de conductor para que el cerebro reciba los mensajes de movimiento- inhibiendo su liberación por lo que la señal de movimiento no llega al músculo relajándolo completamente. Las dosis y tiempo del tratamiento varían en cada paciente, pero en mi experiencia, continuó, tengo pacientes que ya están libres de dolor intenso de cabeza y ahora tienen una mejor calidad de vida. Actualmente Botox, está aprobada en más de 72 países en el mundo.